“Los minoicos descubrieron América 3.700 años antes que Colón”. Es
la teoría con la que el escritor británico y ex comandante de la Royal
Navy Gavin Menzies nos sorprende en un libro que aparecerá
próximamente.
¿Qué cultura explotó hace 4.200 años las minas de cobre en frontera
entre Canadá y Estados Unidos y cómo es posible que se hayan encontrado trazas de nicotina en
el antiguo Egipto? La solución a uno de los “grandes misterios” de la
arqueología puede estar en el próximo libro de Gavin Menzies, que
sostiene que los cretenses fueron los primeros que lograron cruzar el
Atlántico y poner un pie en América, 3.700 años antes que Cristóbal
Colón.
Este autor británico, que también escribe en el Wall Street Journal, ya causó revuelo hace ocho años con su primer libro “1421: El año en que China descubrió América”,
que vendió más de un millón de copias en 130 países y donde afirmaba
que un que almirante chino había llegado a América 71 años antes que
Colón.
Ahora resulta que también los minoicos navegaron hasta América.
“Podemos hacer estimaciones precisas de la longitud, anchura y diseño de
los barcos y por lo tanto calcular su capacidad de navegación
marítima”, explica Menzies. Cuenta para ello con las descripciones de
los barcos en los frescos minoicos y la información obtenida de los
restos del pecio de Uluburun, hallado en 1982 frente a las costas de Turquía y datado en torno al año 1.305 a. C
.Como todos conocemos, la región de los Grandes Lagos
ocupa el norte de los Estados Unidos y forma frontera con Canadá. Tanta
es su extensión que la zona es conocida como "la costa norte". Se trata de cinco lagos, conectados entre sí y con salida al Océano Atlántico a través del río San Lorenzo y golfo del mismo nombre. Si
bien por la parte canadiense es solo la provincia de Ontario la que
tiene límite fronterizo con los Grandes Lagos, son ocho los estados
Norteamericanos que lindan con éstos. Illinois, Indiana, Ohio, Míchigan,
Minnesota, Nueva York, Pensilvania y Wisconsi. Sin embargo ya por el
título habrán adivinado que es otro el tema que en el día de hoy nos
trae a estas aguas, mejor dicho a estas tierras.
El siguiente as en la manga que se guarda el autor es una muestra de
ADN. Y es que cree tener pruebas de que los minoicos llevaron a América
un gen poco común que comparten los indígenas estadounidenses que viven
junto al Lago Superior, cerca de la frontera entre Canadá y Estados
Unidos, precisamente donde se encontraron los ricos depósitos de cobre y
miles de herramientas de bronce. De hecho la investigación científica
se basa en probar que la pureza del cobre de esta zona del lago coincide
con las muestras del encontrado en el Uluburun.
Los Minoicos siempre fueron considerados el primer "pueblo civilizado" de Europa. Tal calificación se vio acrecentada a raíz del descubrimiento del Palacio de Cnosos, con motivo de las investigaciones arqueológicas llevadas a cabo en la búsqueda de mitos y leyendas sobre el Laberinto y su famoso Minotauro.
Sin embargo
persistía una duda que siempre tuvieron los historiadores sobre la
inusual riqueza y abundancia de cobre de la que hizo gala esta
civilización. No existiendo apenas este metal en sus tierras ni en los países con los que comerciaban, eran
los Minoicos los que facilitaban ese mineral a los pueblos vecinos y
nadie sabía cual era su procedencia. Una teoría fundamentada en la
desaparición de inmensas cantidades de cobre de las minas
explotadas en zonas de los Grandes Lagos norteamericanos, en época
neolítica, hacen pensar que los Minoicos, también grandes navegantes,
llegaron a América y explotaron ese mineral allí tan abundante. En las proximidades del Lago Superior fueron descubiertos ricos depósitos de cobre y miles de herramientas de bronce.
La tercera prueba con las que Menzies sustenta su teoría son los
restos de plantas endémicas de América en otras culturas: los rastros de
nicotina hallados en momias antiguas en Egipto y los granos de
maíz grabados en algunos templos (el tabaco y el maíz era desconocidos
en la región). “Los navegantes egipcios no eran capaces de poner en
riesgo sus frágiles barcos -dice Menzies. Sólo los minoicos, con quienes
mantuvieron relaciones comerciales, podrían hacer viajes al
extranjero”.
Sin embargo, si los minoicos fueron los portadores del tabaco
de América a Egipto, ¿no debería haber rastros también en Creta?. ” Un
insecto que está directamente relacionado con el tabaco se encontró
enterrado en ceniza volcánica de alrededor del 1.450 a.C. en la casa de
un comerciante de Akrotiri en Thera. Se llama Lasioderma Serricorne
y es endémico de América. Y no olvidemos que el tabaco aún no estaba
extendido en Europa en el año 1.450 a.C.”, sostiene el autor.
La obra de Menzies no ha visto aún la luz pero ya se están escuchando
las primeras opiniones de la comunidad científica respecto a tan
llamativa teoría, tanto a favor como en contra.
Naturalmente no hay pruebas científicas de que la explotación de las minas de cobre de los Grandes Lagos fuera de manos ajenas a los indios nativos norteamericanos, pero tampoco las hay en contrario, bien es cierto que el profesor encargado de la exploración del pecio turco cree que el cobre encontrado en el barco era de procedencia chipriota. Caso de llegar los Minoicos a América, tampoco se sabe si podrían haberlo hecho por el Atlántico o por el Pacífico, cruzando Asia.
“No hay ninguna prueba de la exploración o explotación de aquellos
yacimientos minerales por otros que no sean indios americanos”, dice
Susan Martin, profesora de arqueología de la Universidad de Michigan que
ha estudiado el entorno del Lago Superior.
“Es teóricamente posible que los minoicos llegaran a Estados Unidos”,
dice John Bennett, un experto en arqueología minoica en la Universidad
de Sheffield. “Sin embargo los barcos eran demasiado pequeños para
llevar suficiente suministro para un viaje tan largo”.
En el mismo sentido se mueve Cemal Pulak, profesor asociado de la
Texas A & M University, que dirigió la excavación de Uluburum. “No
sería viable un proyecto tan ambicioso. A pesar de que los barcos eran
robustos, la cubierta tenía que ser capaz de resistir las tormentas y el
fuerte oleaje”, y añade que el cobre del pecio de Uluburum es de
Chipre.
Pero también hay quien se suma a la tesis del autor británico. Como
el profesor emérito de la Universidad de Oregón Carl Johansen, que apoya
la nueva teoría y dice que está “convencido de que los minoicos no
fueron ni los primeros ni los únicos que lograron cruzar el Atlántico y
el Océano Pacífico.
La polémica está servida.
Fuente: TA NEAImagen: Réplica del pecio de Uluburun. Museo de Arqueología Submarina de Bodrum (Turquía). Wikimedia Commons
ADMINISTRADOR
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada