EL ASOMBROSO ACUEDUCTO DE SEGOVIA

La arqueología oficial data la construcción del acueducto de Segovia en la época del emperador Trajano en uno de los periodos de esplendor del imperio romano, sin embargo hay varias cuestiones que ponen en úmbrete ese hecho.

En primer lugar  es interesante destacar la perfección técnica, la maestría en su construcción y su elegancia, algo que ciertamente no es patrimonio exclusivo de los monumentos y construcciones erigidos en la época de la dominación romana con intenciones mas bien practicas, pero que resulta sobresaliente en el caso del acueducto de Segovia.

Tan sobresaliente es , que resulta curioso que el cenit técnico en la construcción de acueductos se alcanzara en Segovia y no p.ej en la misma Roma como sería lo lógico esperar. Si comparamos otros acueductos conocidos podemos ver algunos notablemente destacados como los fragmentos de Tarragona, Mérida o Coimbra, 

TARRAGONA

ACUEDUCTO LA RIOJA

SAN SEBASTIAN-COIMBRA (PORT)

LOS MILAGROS-MERIDA

PINEDA-SEVILLA

aunque es obvio que con una técnica constructiva y estilo muy distinto al de Segovia, baste ver que el paso del tiempo ha hecho que se hayan derruido y solo las restauraciones y un cuidado en su conservación extremo como en el de Tarragona han hecho posible su integridad y conservación hasta hoy.

Mención aparte merece el acueducto del Pont du Gard en la Provenza, una descomunal obra de ingeniería que constructivamente guarda semejanzas con el acueducto de Segovia.

PONT DU GARDE

No existe nada comparable excepto el ejemplo mencionado técnicamente en todo el orbe romano, y tal parece que posteriormente sus soluciones técnicas hayan sido aplicadas en el circo máximo , la joya de la corona de la ingeniería romana.., con la salvedad de que el circo romano tiene una longitud muy inferior y una altura menor.

Estamos hablando de 17 km de recorrido desde el manantial de la Fuenfria en las afueras de la ciudad.

En la parte más elevada el acueducto mide 28 metros, (con cerca de 6 metros de cimientos) y tiene dos órdenes de arcos sobre pilares. En total tiene 166 arcos. Desde su llegada a la ciudad hasta la plaza de Díaz Sanz hay 75 arcos sencillos, y a continuación 44 arcadas de orden doble, (esto es, 88 arcos), siguiendo después otros cuatro arcos sencillos.

Otro hecho que cabe destacar es que estamos hablando de una construcción sin argamasa o cemento alguno, de hecho se ha constatado que hay bloques soldados uno con otro, algo que solo es posible de manera natural si hablamos de un periodo de tiempo de al menos 12.000 años¡, por otra parte también se ha constatado la existencia de piezas de hierro encajadas entre las piedras, siendo destacable que no hayan sufrido oxidación ni un deterioro con el paso del tiempo, como es habitual con esa solución técnica.

No terminan aquí los misterios pues según recogen las investigaciones del especialista, el historiador húngaro Geza Algoldy, el mayor experto mundial en epigrafía clásica latina, a quien se le encargo descifrar las trazas de las huellas dejadas por las antiguas inscripciones que figuraban en lo alto del acueducto en su zona de máxima altura, esta inscripción según Geza Algoldy decia que el acueducto había sido limpiado y restaurado en la época del emperador Trajano.., pero no construido por el.

INSCRIPCION ACUEDUCTO DE SEGOVIA

Hay que decir que aunque algunos autores mencionan que la construcción data de la época de Tito o Vespasiano emperadores anteriores a Trajano , resulta muy extraño que ningun testimonio ni crónica romana lo mencione teniendo en cuenta la sistematica preocupación por explicitar y publicitar cualquier obra a mayor gloria del imperio que se hiciese lo cual se puede ver con el cartel que figuro desde antiguo testimoniando aunque fuese una operación de limpieza como concluye Geza Algody.

GEZA ALGODY

Posteriormente a este estudio las autoridades oficiales españolas han intentado echar tierra sobre dicho estudio, silenciando sus conclusiones e intentando interpretar sus conclusiones de manera sesgada, hasta que el oportuno fallecimiento por un ataque de corazón de Geza hace pocos años  ha permitido guardar en un cajón dicho estudio.

Dada la brutal manipulación y falsificación histórica que desde hace siglos sufre la historia oficial de España, lo cual no deberíamos confundir con la península Ibérica, la cual por cierto existe desde hace más de 3000 años, y no así España como tal, no me extraña lo más mínimo que este ejemplo temprano de la historia de la península Ibérica sea uno de los primeros ejemplos de dicha manipulación, sobre la que vale la pena extenderse en fechas y artículos posteriores. 

Aun hay otras preguntas ha hacerse frente al en mi opinión tan enigmático monumento.

Una de ellas es plantearse la utilidad real de dicho acueducto para traer agua a una ciudad con dos ríos –El Eresma y Clamores confluyendo en ella. Recordemos que el acueducto de Segovia tiene unos 17 km de longitud, y capta las aguas de un manantial llamado Fuenfria desde siempre lugar en la sierra del Guadarrama de aguas consideradas milagrosas.

El acueducto iba a parar al actual Alcazar que antiguamente era donde estaba ubicado el palacio real y más antiguamente el lugar de poder de los antiguos señores, residencia de los reyes de Castilla.

Resulta un tanto extraño tan descomunal esfuerzo para traer agua desde tan lejos teniendo tan cerca el río Clamores...al pie del Alcazar y por cierto este muy cerca de la muy especial ermita de la Vera Cruz de Segovia de tradición Templaria...

Estamos hablando de un lugar muy especial y sobre el origen de los constructores y aun sobre el porque de su construcción, cabe especular algunas hipótesis.

Sobre realmente quien pudo haber hecho semejante construcción una pista nos llevaría a la tradición de Hércules, cuya efigie por cierto se dice que estaba esculpida en la parte superior del acueducto. Existe la tradición de su paso por la península Ibérica, tal vez el paso de Hércules sea una empresa que fuera mas allá de un solo individuo y fuera la manera de designar un grupo o incluso un pequeño ejercito.

Por otro lado tenemos la tradición y la leyenda que nos cuenta de la presencia de –“Hércules el Egipcio”-.., este Hércules se halla relacionado a múltiples leyendas como la de las cuevas de Hércules y la tradición subterránea de Toledo, lugar donde enseñaba “las ciencias ocultas”, sin embargo son numerosos los lugares en la península Ibérica que hablan de su presencia e incluso la tradición conocida de construcciones atribuidas a Hércules como el faro en La Coruña.

CUEVA DE HERCULES

 Ha sido propuesta la hipótesis de un origen egipcio del mismo nombre de Hispania. La misma es desarrollada en un reciente libro del escritor Georgeos Díaz-Montexano donde expone lo siguiente: 

"Hispania sería la pronunciación latina de una forma púnica como 'Y-Span-ya, que según las más recientes y autorizadas interpretaciones significaría: "Isla de los Forjadores o Fundidores de Metales" (Cunchillos, 2000) . Otras viejas hipótesis proponían: "Isla del Norte" o "Isla de los Conejos". Lo cierto es que si bien la segunda parte del nombre ha derivado en diferentes hipótesis, la primera parte, 'Y, siempre ha sido aceptada por la mayoría como correspondiente al fenicio 'Y (pronunciado I) 'Isla/costa'. La antigua tradición de los fenicios y cartagineses de identificar a la península ibérica como una "Isla", la conservaron los árabes y beréberes, quienes llamaron a toda Iberia con un único nombre, "Yazirat al-Andalus", esto es: "Isla de Andalus o Andalos". De Andalus -escrito en las más viejas grafías árabes como Andlws o Addlws- dicen algunas fuentes islámicas medievales que era el mismo Atlas o Atlante, hijo de Japhet o Jápeto. Por lo que los árabes realmente estarían denominando a Iberia como la "Isla de Atlas o Atlante", que es justa la traducción de la denominación griega que Solón usó para la isla de la Atlántida, o sea, Atlantis Nêsos, "Isla de Atlas o de la Descendencia de Atlas".

Eso es lo conocido hasta hoy. Pero el autor ha logrado hallar numerosas referencias a una gran isla en el océano (La Isla de los Dioses), frente a un estrecho canal (Columnas de Hércules), que encaja en su títulos, denominaciones, descripción, y hasta en su ubicación, (al ser representadas en muchos mapas antiguos egipcios, en lo que sería el Golfo de Cádiz) con la misma "Isla de Atlas o de Atlante" que nos describe Platón a través de Solón, con el nombre griego de ATLANTIS NÊSOS, que justamente se traduce como "Isla de Atlas" o "Isla de la Descendencia de Atlas".

No es aventurada la hipótesis de que un grupo de constructores, maestros constructores de la tradición egipcia vinieran de visita a la península Ibérica y dejaran algo más que trazas ínfimas. Es bastante ingenuo creer que 1500 años de Cristo los egipcios no tuvieran la capacidad de mandar expediciones marítimas organizadas con objetivos concretos a un espacio, por cierto no tan lejano ya que hablamos del Mediterráneo.

Incluso parece bien mirado extraño que la mayor potencia de la época, de quienes los fenicios fueron en algún momento dependientes, no orquestara expediciones a cierta distancia de su reino.

No solo se trata de averiguar quien realmente hizo semejante monumento sino preguntarse el porque, y la respuesta bien podría ser el conseguir llevar a un punto muy concreto de Segovia precisamente con el acueducto, un agua con lo que se lograba una confluencia de tres corrientes, una de ellas calificada de milagrosa o “sagrada”. En cualquier caso cabe abrir unas cuantas preguntas en torno a estas cuestiones y cuestionar precisamente la versión oficial de la historia, no solo la de la romanización en este aspecto concreto sino de la misma península Iberica de la que este episodio solo sería la punta del iceberg.  

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